"¿Por qué se forman tumultos entre las personas, y la gente piensa cosas vanas?"
(Salmo 2: 1)
El 28 de enero de 1986, el transbordador espacial Challenger explotó a los 73 segundos de su lanzamiento (en la que iba a ser su décima misión), destruyendo también las vidas de sus siete desprevenidos tripulantes. Las dos fotos de arriba dan testimonio de la catástrofe.El simpático mozo de las tres fotos de más abajo, que lo mismo toca los bongós que da interesantes y profundas explicaciones de Física, es Richard P. Feynman. Considerado el físico teórico más destacado de la posguerra, premio Nobel de Física en 1965, trabajó en los campos de la electrodinámica, gravedad y computación cuánticas, superconductividad, interacciones entre partículas en el espacio-tiempo, nanotecnología... En los años de la Segunda Guerra Mundial fue reclutado para participar en el Proyecto Manhattan (sí, para producir la bomba atómica... pero no sé si es ventajista hacer cierto tipo de juicios a posteriori) y, poco antes, su tesis en mecánica cuántica le había distanciado de las teorías de Albert Einstein (este último transitaba por otros caminos). Al margen de estos conocidos trabajos en el campo de la Física, Feynman también fue una persona interesada en muchas otras materias. Apasionado del arte, fue un pintor que alcanzó relativo éxito (llegó a realizar una exposición bajo un pseudónimo), también aprendió a tocar el tambor en Brasil y participó en una escuela de samba. Este tipo de dedicaciones, junto con sus muy liberales opiniones acerca de sexualidad que nunca dejó de divulgar, le granjearon cierta reputación de excéntrico, cosa que a él no pareció importarle en absoluto. Es posible que la influencia de los padres del eminente físico (su padre siempre estimuló su curiosidad y le animó a cuestionarse el razonamiento tradicional, no aceptando nunca que un asunto quedara sumido en el oscurantismo; mientras que de su madre heredó un profundísimo sentido del humor) llevaran a Feynman a ser el tipo de persona a quien no detienen las zancadillas ajenas. ¡Bien por Feynman!
Vale... pero ¿qué relación hay entre el Challenger y Feynman?
Después del accidente del transbordador, se requirió a Feynman para colaborar en la Comisión Rogers que tenía como objetivo investigar las causas del desastre. Y aquí viene lo bueno, porque (como suele pasar en estos casos) la versión oficial no coincidió con la opinión de Feynman, que logró demostrar con un simple experimento lo que había provocado el accidente. Insistiendo mucho, consiguió que su versión fuera incluida como un apéndice al documento oficial. Finalmente, el libro titulado ¿Qué te importa lo que piensen los demás? es la historia relatada por Feynman sobre su trabajo en la Comisión.
El bueno de Richard había dicho que "para lograr un éxito tecnológico, la realidad debe estar por encima de las relaciones públicas, porque la Naturaleza no puede ser engañada". ¡Toma ya, diplomacia!
Me recuerda esto a un asuntillo que traté en otra ocasión (aquí) acerca de la verdad de las máquinas. Mientras que la verdad de las máquinas es de una objetividad palmaria, la verdad de los humanos siempre va a estar matizada por una lista enorme de factores que la desvirtuarán más o menos. Uno de los factores de esa lista es el asunto "relaciones públicas"... Para los seres humanos, todo un arte: la diplomacia, lo políticamente correcto, las apariencias, el quedar bien, el qué dirán... ("cariño, ese vestido te favorece mucho", "hombre, señores Plómez, cómo nos alegra su visita", "no has envejecido nada en estos últimos diez años", "uy... no me va a ser posible asistir a esa reunión mañana: tengo un compromiso importante", "has adelgazado, ¿verdad?", "¡qué bebé tan lindo! es realmente precioso" y un largo etcétera que no siempre coincide exactamente con lo que se está pensando). Aunque habría que sumar también la mentira piadosa (más comprometida y comprometedora emocionalmente y, por tanto, algo diferente a la mentira oficiosa, que es el espíritu de lo anterior). En fin, ya sea por agradar o por proteger, cuántas veces se enmascara la realidad bajo una capa de conveniencia... Y pienso en alguna situación menos trivial. Por ejemplo, imagino a ese enfermo terminal que todavía no conoce lo que se le avecina porque su familia quiere ir dosificándole el disgusto. ¿Qué versión es la que prefiere cada uno... el enfermo, los familiares? Aún no se me ha presentado la oportunidad de tener que tomar una decisión en semejante trance. No sé lo que haría.
También pienso en otro caso, de ficción (aunque reflejo de muchos otros casos reales parecidos), en la película Atrápame si puedes (Catch me if you can). Hay un momento del film que me parece realmente emotivo y, para mí, son algunas de las secuencias más deliciosas de todo el largometraje. Se trata de los encuentros entre el protagonista, Frank Abagnale jr. (Leonardo DiCaprio), y su padre, Frank Abagnale sr. (Christopher Walken), después de que los problemas se abatieran sobre la familia. Ambos se citan en restaurantes y otros lugares para contarse sus vidas, cómo les va, y ¡se mienten como bellacos! ...pero el asunto es que ambos saben que se están mintiendo y siguen con el juego. Es una especie de La vita è bella, un edulcorar una triste realidad, pero con una diferencia sustancial respecto a la película de Benigni: se conoce la realidad, no se ignora. Es otra forma de aplicar relaciones públicas, de proteger del daño conocido a quien se quiere, sin ocultar pero mirando hacia otro lado...
Y mi mente apunta ahora hacia mi familia, que está pasando un año verdaderamente malo, allá en el otro lado de la península. También ellos saben que el mío no ha sido para tirar cohetes. A veces he pensado que, sabiendo que nada cambia, que todo sigue igual, no estaría mal que nos mintiéramos un poco, aun sabiendo que estamos mintiendo. Pero que nos contáramos una historia posible, que es la que nos gustaría estar viviendo... y, al dirigir nuestra mirada hacia un poquito más arriba, conseguir echar un vistazo a lo que sí se puede alcanzar. Y coger ánimos para lograrlo.
Ya sé que con esto no pondríamos en órbita un transbordador... pero ¿qué me importa lo que piensen los transbordadores?
Genial entrada, amigo.
ResponderEliminarMe alegra ver poraquí al amigo Feynman que logró darme una visión agradabilísima de la Física en medio de tantas abstrusas explicaciones de los textos al uso.
No sabía su intervención en el caso Challenger, pero me cuadra un montón con su carácter de prodigioso excéntrico.
No era desde luego un espléndido relaciones públicas, pero era un genio.
Abrazos.
Un trasbordador no, pero has hecho despegar mi primera sonrisa matutina...y sin poder abrir casi los ojos.
ResponderEliminarSo wapo.
ybris
ResponderEliminarCreo que si Feynman hubiera sido un espléndido relaciones públicas, su genio se hubiera ido por el desagüe. Me gusta más el Feynman excéntrico (si es que se puede llamar excéntrico a alguien por ser como le apetezca :D)
Un placer para mí haber hablado de un tipo extraordinario.
un fuerte abrazo
poledra
Eres un solete, madrugadora ;D
Me da más satisfacción hacer despegar sonrisas que transbordadores. Ya lo creo!
un besazo
Eso de las mentiras piadosas...uhmm, no sé hasta qué punto está bien...
ResponderEliminarLo que sí sé es que las utilizamos muy a menudo para evitar sufrimientos a los que queremos.
El caso de una enfermedad terminal, lo he vivido de cerca, y no sólo se le ocultó al enfermo, sino a algunos de nosotros, su familia...por evitarnos sufrir, pero el sufrimiento fue el mismo cuando murió, o más! porque no lo esperábamos.
A lo mejor hubiera preferido que me lo dijeran, me habría despedido a mi manera, no habría frivolizado en algunos momentos, días antes, le habría demostrado en cada momento lo mucho que lo quería...
Cuando te preguntan: "qué tal te va?", sino quieres que esa persona padezca lo que tu contestas:"bien, bien"...con ésto qué se consigue? cierto no lo sé, pero parece un sentimiento innato de algunas personas, por amor, supongo.
Pero, y desde el punto de vista del que recibe la piadosa? realmente preferiría esa mentira?
Espero que si has pasado un año no demasiado bueno, a medida que pasen los días se vaya aclarando.
Muchos ánimos y besos.
Yo sí creo en las mentiras piadosas cuando hace falta. Y hace falta cuando esa verdad de nada le sirve al otro excepto para sufrir innecesariamente. Lo sé por experiencia. Sé como a una mujer anciana y enferma se la hizo sufrir pues se le dijo algo que la llenó y la sigue llenando de pesadumbre y abatimiento,cuando en absoluto era necesario que se entera de tal cosa pues nada puede hacer excepto llorar amargamente. No fue una verdad, fue una crueldad innecsaria. Yo por mi parte, cuando sé que sólo puedo aportar dolor y absolutamente nada más a gentes a las que quiero y por tanto no quiero ver sufrir, me cuido muy mucho de callar y si tengo a la fuerza que contestar porque preguntan, entonces, sí, miento con mentiras piadosas, como una bellaca si quieres, me da igual. No pienso hacer sufrir a los que quiero a no ser que sea absolutamente necesario.
ResponderEliminarBesos de la a veces bellaca mentirosa.
Sí, mentiré: ¡qué contenta estoy!
ResponderEliminarYo también miento como una bellaca. O para evitar dolor a la otra persona, o por que cuando alguien me pregunta qué tal me va, en realidad le importa un pepino como me va. Es un quedar bien. Si le cuento que tengo tal y cual problema, la próxima vez cambiará de acera cuando me vea.Y en mi trabajo también tengo que mentir a menudo.....
ResponderEliminarPara evitar un sufrimiento o en el trabajo, pues no me produce ningún tipo de remordimiento.
La mentira más social, pues no soy muy buena practicándola y por eso debe ser que para muchos soy un auténtico "callo"...jajaja. Para no oir una verdad incómoda....caray!, no me preguntes!!
Pero bueno, en vista de los resultados, trato de ser un poco más diplomática, porque he hecho daño sin tener tal intención.
Ciao.
No me gustan las mentiras, ni las piadosas aunque se que a veces son necesarias, y las he utilizado (no voy a ir ahora de que no lo he hecho). Pero creo que la gente usamos más otra alternativa, no hablar de algo que es doloroso, como si con eso consiguieramos que no existiera... hay que dominar la diplomacia pero no huir de la verdad nunca, encararla y no tenerla como enemiga.
ResponderEliminarAunque también en esto hay que ser flexible, saber sobretodo hasta dónde decir las cosas
En la situación menos trivial que planteas, hay que contar con la inteligencia del enfermo, con su fortaleza o debilidad, con su manera de encarar los problemas y saber si decirle toda la verdad va a hacerle salir hacia adelante o hundirse en la miseria. En mi caso, con la enfermedad de mi ama, hemos optado por esperar y amoldarnos al ritmo de mi madre y es ella, dentro de su desorientación temporal, la que nos está marcando el ritmo de una manera sorprendente. Se que lo sabe, que conoce la gravedad de lo que tiene, es una mujer práctica y aunque a veces se le olvida si es de dia o de noche, tiene claro que nos tiene ahí hasta que diga adiós como solo ella sabe y esperamos que eso se retrase lo más posible y sin sufrimientos...
Creo que a mi me gustaría saber si tengo la fecha de caducidad puesta si me enfermo, porque me gustaría despedirme a mi modo, es más, con todo esto de la enfermedad de mi ama, he pensado en hacer mi propio testamento vital, atar cabos para no dejarlo a la decisión de alguien que no me conoce tanto como yo misma...
Siento mucho oir que la situación de tu familia y sobretodo que tu situación no es la mejor, pero más que la mentira piadosa, es mucho más útil saber que estais ahí incluso en la distancia, que contais con el otro, que sin palabras podeis deciros que os quereis, que os acompañais si las cosas vienen mal dadas pero que os manteneis a flote. Y todo esto lo digo sin tener ni idea de qué situación es y pidiendote perdón por si mi atrevimiento y si mi falta de diplomacia te molesta (te permito el tirón de orejas, acepto con lentitud las verdades :o))
Muchos besos Raindrop, mucho ánimo como el que tu repartes a todo el mundo que estamos pasando por malos momentos. Se, estoy completamente segura, que estás bien porque tienes a gente que te quiere a tu alrededor, nosotros quizá somos virtuales pero vemos el halo que desprendes y nos gusta, así que sientete acompañado al menos un ratito...
Pues yo creo que si de vez en cuando nos dijéramos la verdad, al final acabaríamos partiéndonos de risa compartiendo las desgracias.
ResponderEliminarEjemplo:
- ¡¡Fulanito!! cómo te va tío, cuánto tiempo.
- Pues mira, menganito, me va lo que se dice de puta pena.. pero vamos que me he enterado que a ti tampoco te va nada bien ehh...
-Psssé.. he engordado 10 kilos y me ha dejado la novia, eso sí... nada que ver con ese forúnculo tuyo que tiene toda la pinta de ser malo, pero malo, malo.
-Uy, sí... y además de eso, que hace un año que no levanto cabeza, ni cabeza... ni nada.
-Lo dicho tío, pues hala... ¡a empeorarse! Y... oye, que sigas así de viejo eh.
Bueno... era sólo una idea.
Besos campeón.
La mentira no es una buena compañera, desde luego, pero creo que tendemos a sobrevalorar la verdad o la sinceridad. Hay ocasiones en las que se hace necesario pintar de otros colores lo que te rodea. Por una cuestión de higiene y salud mental. Porque si mejoramos la realidad, puede que algo se nos pegue de sus brillos de estreno.
ResponderEliminarMe ha impresionado mucho tu post, querido Raindrop, porque algo parecido me dijo hace poco mi chico sobre su familia, también muy vulnerable en el último año.
La necesidad imperiosa de desviar la verdad, de camuflarla en colores más vistosos, aunque sólo sea por un rato, para no asfixiarte entre tanta negatividad, para no perder pie entre tanta desesperanza.
Y creo que se hace necesario recurrir a este pequeño ardid, porque el autoengaño consciente es, a veces, un mecanismo de defensa para no caer en lo más profundo.
Es una tregua, una pausa, un paréntesis para recargar fuerzas, para reponer combustible y seguir avanzando.
Te mando un abrazo de oso (como dice una amiga), fuerte y cálido.
Mucho ánimo, amigo.
Sobre todo..me mola ese título, y qué importa..ja!
ResponderEliminarNo, mentir no..para qué, pero a veces es necesario,pero tal vez para evitar dolor..algo así.
Un beso niño, te echo de menos!
xiketä
ResponderEliminarMe quedo con una conclusión: hay que aprovechar cada momento porque es único y nunca más se repetirá. Si una mentira (aunque sea piadosa) va a impedir saborear esta gran verdad, mejor desecharla. Pero si ya se tiene el hábito de vivir apurando cada sorbo de vida, esto no hay mentira piadosa que lo empañe.
Gracias por tus ánimos :D
besos
siberia
jajaj te tomaste lo de "mentir como un bellaco" al pie de la letra ;D (es una forma de hablar, ya imaginas)
Bueno, decía el sabio Salomón que todo tiene su tiempo bajo el sol... hay tiempo de hablar y tiempo de callar. Sólo falta saber decidir cuándo hay que hablar y cuándo hay que callar. No siempre es sencillo.
besos
ana
jajaj pero así no vale, nena... hay que currarse una historia ;D
besos
pilar
uiss los que me conocen saben de sobra que a mí eso de mentir para quedar bien no es mi especialidad... ¡se me nota demasiado! Así que si me preguntan algo y guardo silencio o cambio de tema, ya saben que mi respuesta sería contraria a sus gustos.
Me gusta la diplomacia cuando siento que es necesaria, cuando la amabilidad es sincera, pero no me gustan nada los paripés (brrrr... los detesto)
La de problemas que me creó esto con mi exfamiliapolítica uf
besos
avellaneda
Tú sí que estás pasando por una situación como la que describía en el post... uf, qué difícil ¿no? Pienso que muchas veces es complicado controlar algunas reacciones cuando los sentimientos se van a los límites, pero me admira ver tu entereza y me ha gustado tu respuesta.
hummmm... lo del tirón de orejas... pues vaya, que no entiendo por qué tendría que reprender a alguien que me dedica cariñosas palabras con tanta amabilidad. No te daré un tirón de orejas, más bien te daré un enorme "GRACIAS" y un fuerte abrazo
y muchos besos :D
carmen
jajajaj pues es cierto, esa conversación parece un buen antídoto contra los males y también serviría para desangustiar :D
Pero requiere de un interlocutor con un sentido del humor a prueba de bomba (que, si no, como sea muy susceptible se acaba la terapia en un milisegundo ;D). A veces no es fácil encontrarlo. Pero en caso de tenerlo delante, no habría que desaprovechar la oportunidad.
besos
tamara
Sí, veo que me entiendes. En realidad, no hablo de un autoengaño porque las cosas siguen estando ahí y se asumen como son, pero sí de una "evasión controlada". Es como quien se va de vacaciones... sabe que su vida no es estar en un hotel, en una ciudad distinta y rascándose la barriga; pero de vez en cuando es necesario un escape lejos de lo cotidiano para recargar pilas. Algo así. Un baile de disfraces, una obra de teatro... eres alguien diferente por unos instantes, pero sabes siempre quién eres en verdad
(no sé si me explico :D)
Y te agradezco muuuuuucho ese abrazote. Siempre vienen bien, ya lo creo.
besos
tormenta
jajaj sí, el título es buenísimo. No leí este libro de Feynman, pero seguro que merece la pena. Me gusta muchísimo su estilo.
Yo también te echo de menos. Veo que hoy has publicado algo, ahora mismo me paso por allí :D
besos
En cuanto al challenger, recuerdo que mi abuelo me lo contó nada más llegar a casa. Me dijo: ¡El cohete ha hecho candil! Esa expresión viene de los tiempos del carburo, que cuando algo fallaba, en vez de luz hacía humo.
ResponderEliminarMentiras piadosas. Todos sabemos lo útiles que son. Las utilizo cada vez menos. Creo más en el silencio sonriente que en la mentirijilla aduladora. A medida que pasa el tiempo y pierdo la necesidad de usar las relaciones públicas utilizo más el no que el si. Aprender a decir NO es algo que me ha hecho mucho bien. He perdido dinero y muchas compañías pero lo que tengo es lo que de verdad quiero tener.
El buenismo también existe el mundo blog. Echo de menos alguna crítica. Parece que todo lo que aquí se hace es cojonudo. Ya sabéis, a partir de ahora admito críticas en mis posts. Nada más refrescante que un chorro de agua fria en el cogote.
Un fuerte abrazo.
Pues coincido con el Instigador en lo del buenismo y el peloteo empalagoso en el universo bloguero. Que es que ya nos sale pelusa en las manos de tanto pasárnoslas por el lomo. Aunque es cierto que entre nosotros somos mucho más benévolos porque sabemos lo que nos cuesta parir un texto decente que dé orden y concierto a nuestras respectivas idas de olla (no vale rimar). No sé tú, pero yo recibo las críticas de amigos y conocidos. Algunas de ellas ni siquiera son constructivas, por lo que sólo me queda decir eso de "pues hazlo tú si tienes c.j.n.s" sin embargo... no sé si en ciertas "verdades" no se encierra más alguna impertinente puntita de envidia que de honestidad bien entendida.
ResponderEliminarY que siga la bola que el debate está abierto.
Reciba usted un empalagoso abrazo de esta colega bloguera.
Teneis razón en parte, no es adulación o peloteo, es como un abrazo entre amigos para darse calorcito y animar a mejorar. También es cierto que una crítica a la manera de relatar, la corrección de los fallos que se cometen, una construcción para mejorar lo que se relata se agradece.
ResponderEliminarSomos condescendientes con nosotros mismos porque algunos de nosotros nos consideramos amigos, aunque eso de la amistad es algo más complicado y de más tiempo que la lectura de éstos rincones. También es algo de lo que dice Carmen que cuando te cuesta a ti crear algo sabes que al que le lees le cuesta igual y tiendes a arrimar el hombro solidario y darle un empujoncito. Eso no está mal, no lo creo, pero como todo, si se abusa puede tener un efecto al menos raro.
También es cierto que depende de la intención del que escribe el blog, los hay que descargan su mundo interior sin pretensión artística, solo por gritar con palabras lo que quizá no pueden soltar en su día a día, en éstos es difícil, si el que lo escribe lo sientes amigo, soltar una crítica o comentario, es más, creo que no te provoca hacerlo, al menos a mi.
Los hay que sacan su vena literaria y artística, que escriben para soltarse y crear, en éstos si que se puede uno esforzar en dar algo para mejorar o cambiar. No sé en qué rango estás Raindrop aunque yo te siento un poco amigo y como tal tiendo a dar el mejor ánimo y consejo, lo que no quita en que si no me gusta lo que leo también lo diga.
Instigador prometo poner el ojo crítico pero es algo complicado porque me gusta como escribes -y esto no es peloteo, no señor-... y espero de tí y de todos el mismo trato :)
instigador
ResponderEliminarVeo que has abierto un interesante debate (que me parece que ya anticipabas en otra parte, si no me equivoco). Y tengo que darte la razón en que es posible que el clima de la blogosfera exagere algunas cosas. Una muestra: esa manía que se ha instaurado de premiarlo todo. Yo ya escribí sobre eso en su momento, porque me parece que desvirtúa en parte lo llano y directo de nuestras relaciones. Creo que sobran pedestales, me gusta cuando nos miramos a los ojos.
Puedo asegurarte que he sido absolutamente sincero con todos mis amigos de la red, que no me he pasado en las valoraciones... porque, de entrada, ¿qué formación tengo yo para hacer juicios de maestro? Si un texto me ha gustado, lo he dicho (justificando el porqué en ocasiones o cómo se podría mejorar según mi criterio) y si no me ha gustado en absoluto, me he callado.
Al margen de eso, el clima de amistad favorece que nos tengamos más consideración y no seamos fríos o pelín crítico-ácidos entre nosotros... demasiados cástings se ven ya en la tele ;P
Como tú, aprecio la crítica, porque es un buen método para la superación.
un fuerte abrazo
carmen
jajajaja "pelusa en las manos de tanto pasárnoslas por el lomo"... bueno, por la parte que me toca, alguna caricia cariñosa sí que habré dado, pero jamás peloteo. Es que no me sale. Si algo no me gusta, me callo, simplemente. Flaco favor se le hace a un mediocre inflándole el ego, por eso dedico mis elogios siempre a quien creo que los merece y que los va a administrar correctamente.
En ocasiones, nuestras palabras además de una crítica positiva también tienen un componente de ánimo, que falta hace. Hay que ser valiente para lanzarse a escribir (muchas veces sobre interioridades) y eso merece algo de reconocimiento.
Recibo ese abrazo empalagoso ;D
besos
avellaneda
jajajaj te acabas de ganar el puesto de secretaria de close2u, que estaba vacante :D
En fin, que has respondido exactamente lo que yo hubiera dicho (¿lees pensamientos? ;P)
Y, por supuesto, admito todo tipo de críticas constructivas, en positivo y en negativo. Pienso que una de las funciones de un buen amigo es saber hacerlas a tiempo (como también es importante saber recibirlas con agrado)
besos
Por principios o por experiencia creo que todo vale, la verdad, la mentira y las derivaciones de ambas, todo depende del momento o del sufrimiento que generen una u otra...
ResponderEliminarLos puristas pueden pensar eso de la verdad siempre por delante,pero tambien tenemos nuestro tiempo de no decirla... ¡¡variopintos que somos¡¡
No me gusta callar, los silencios me dan miedo, prefiero la palabra pero no la disfrazada, intento ser diplomática pero si el bebé es feo de narices me limito a sonreirle y por más que lo intento no me sale nombrarle bebé del año¡¡
En casos extremos, he vivido dos en este año, la enfermedad y desenlace de mis hermanas, hemos seguido las dos pautas de las que hablas, con una todo fué verdad porque ella dirigió su camino con una fortaleza que jamás hubiese imaginado, yo sólo me limité a ser su bastón de apoyo, en la otra está siendo más difícil desde la mentira, pero es que ella tal vez por su vulnerabilidad no aguantaria una verdad de semejante calibre...aunque y no me mueve el cariño (que si), tiene un par..
Por eso creo que nada es blanco totalmente ni negro zaino¡¡
Sólo me gusta pasarle la mano por el lomo a "Fiona" mi perra ,que hoy cumple años como tu blog ;)... En mis paseos recalo a veces en blogs en los que no puedo pasar de la primera línea, y seguramente serán de una calidad impresionante,pero si no existe algo que me haga detenerme en ellos, quedarme a convivir con sus palabras me cuesta volver, la empatía juega un papel importante, de hecho no tengo una lista interminable de blogs a los que visito porque no sería mi realidad, no todos me gustan ni a todos gusto...ni falta que nos hace¡¡
No me gustan los concursos ni las rivalidades, tampoco creo que esto esté inventado para ver quien es el mejor, simplemente para ver como somos ...algunos mediocres que tambien tienen o tenemos derecho a escribir, bien , mal o muy mal...
Ojalá que si este año no ha sido el mejor de tu vida, todo cambie porque lo mereces, y porque por lo poquito que te conozco creo que eres una persona genial...
¡No te estoy pasando la mano por el lomo...no¡¡¡ es la sensación que me has dejado durante estos meses compartiendo momentos.
Muchos besos
Es difícil saber si quieres verdades o mentiras cuando las cosas están duras. No es mentira piadosa, sólo un buen deseo: todo irá mejor, seguro.
ResponderEliminarYo sólo las quiero (las mentiras) cuando dudo y pregunto: ¿Me queda bien este vestido?. Esa cara de respuesta me hace ver que siempre es mejor no poner a nadie en esos compromisos.
Sé feliz, ahora que sé que te vas de viaje, más aún. Te daría un buen abrazo, pero sólo sería virtual y me sabe a poco.
Anda... no tenía la sensación de presentarme a una oposición de secretaria, pero mira, te lo agradezco mucho pero si no te parece mal desisto del puesto, gracias. Y en cuanto a leer pensamientos te diré que a veces si y lo odio cuando no me gusta lo que leo. Otras veces es muy útil y en otras ocasiones me es imposible. Todo depende de la transparencia de la gente
ResponderEliminarBss
sib
ResponderEliminarCada situación es tan diferente a otras que debe analizarse de forma individual. No hay dos personas iguales y, en cada caso, se necesitan formas de actuar distintas. Entiendo lo que dices.
Mi lista de blogs visitados tampoco es demasiado extensa, porque mi intención era tener una relación algo más entrañable con los autores que un simple pasar a toda velocidad. Algún otro también lo tengo enlazado porque me gusta el contenido, aunque no haya profundizado mucho en mi relación con quien hay detrás de los escritos. Siempre preferí tener menos amigos pero muy buenos que muchos pero del montón.
Una pequeña aclaración, cuando dije mediocre no me refiero tanto a la calidad de los escritos, sino a la actitud del escritor (los hay que parecen darse unos aires...) Desde luego, no he enlazado ningún blog cuyo autor no me transmitiera buenas vibraciones, independientemente de que mi valoración de sus textos pudiera ser alta.
Por último, te agradezco mucho tus buenos deseos hacia mí. Eres genial :D
besos
chalá perdía
jajaaj es que... vaya preguntita comprometida, ahí se pueden herir susceptibilidades ;D
Un abrazo virtual sabe a poco, sí. Me encantaría darte uno bien apretao, con los brazos.
besos
avellaneda
uis... a mí lo de leer pensamientos se me da fatal-fatal. A veces he tenido problemas para leerme los míos propios, así que desistí de intentar leer los ajenos.
El puesto de secre estará eternamente vacante. Mejor así. me gusta más cuando todos podemos revolver la salsa a voluntad.
Es lo bueno de los blogs.
Hasta pronto, amiga :D
besos