"Aire. Soñé por un momento que era aire:
oxígeno, nitrógeno y argón, sin forma definida ni color.
Fui aire, volador".
(José María Cano, Mecano, "Aire")
Se viaja por la vida igual que si se tratara de globos aerostáticos. Fluctuando, arriba y abajo, mecidos por olas del cielo, empujados por vientos que trazan caminos en la atmósfera, como corrientes en el mar.
Hay días en que se calienta el aire que llena mi interior, alguien o algo lo logra, y entonces siento que puedo volar libre y sin cargas, o incluso me veo capaz de arrastrar todas esas cargas en una sobrecogedora ascensión, sin resentirme por el equipaje. Otros días, como los recientes, mi fluido interior se enfría de súbito, quizás no exista un motivo aparente, una causa reconocible, y entonces no soy capaz de despegar (o despegar-me) del terreno del que un día nos emancipamos todos por aquel aliento primigenio. Es posible que el duro azote de vientos gélidos haya comprimido mi aire, lo haya hecho más denso, más pesado. Plúmbeo espíritu, ánimo gris, precipitándose...
Y es ahora aire retenido a ras de suelo, en una superficie pantanosa de aguas estancadas y arenas movedizas. Un lugar donde acaba marchitándose todo aliento de los vivos y donde se abre una sima en la que hundirse cada vez más. Este no es el hogar de mi aire, no puede serlo. En cambio, es vivienda de miasmas, de espectros sulfúreos, de vapores espesos y cargantes, de todo efluvio que hace de plomada y lastre de los sueños.
El aire se convulsiona, envenenado, retorciéndose como la llama de una vela amenazada de extinción por el zarandeo del viento. Hay que abandonar el abismo, salir del pozo. Hay que calentarse, hay que agitar el aire que llena lo que es apenas una corteza, hay que provocar el sutil juego de convección. Templarse, entibiarse, excitarse, avivarse, enfervorizarse...
(sin embargo, abrirse una lata de cariño en conserva puede ser un alimento bastante pobre para entrar en calor)
Por fin, cuando me vea otra vez remontando, pensaré que solo se trata de aire caliente.
Excelente texto, amigo. El camino que llevemos es a virtud del aire y su antojo en cierta forma, pero seguro de como lo acompañemos y aprovechemos.
ResponderEliminarMe recordaste una antigua entrada. Estoy seguro de que te gustará.
http://superehore.blogspot.com.es/2011/06/inflas-mis-velas.html
Sí, me gustó la entrada :)
Eliminarpreciosa entrada. El aire, como el viento, se presenta con características diferentes e inesperadas... solo hay que saber reconducirlo, que no es facil. Pero aprende de los veleros, esos si que saben... besos.
ResponderEliminar¡A desplegar las velas! ;)
Eliminarmuacks
El cariño disfrutarlo mejor fresco, enlatado pierde mucho... ;P
ResponderEliminarDemasiado. No llega ni a sucedáneo. Ighs!
Eliminar:)
Ya sabía yo que llevar en la cabeza "El sitio de mi recreo" no podía ser más que aire plúmbeo.
ResponderEliminarSe hace extraño ese cambio tan radical de percepción, no se acostumbra una aunque vuelva, vuelva una y otra vez.
Nos cabe el consuelo de saber que volverá a ser sólo aire.
Tremenda entrada raindrop, sin velos, todo valentía¡
Besos
Hay días de bajón. No sé si hay mucha valentía en reconocerlo, pero aquí está contado.
EliminarMás o menos :)
besos
No es lo mismo un aire, que un viento, una brisa o un tornado; no es lo mismo elevarse que volar. Te deseo un vuelo fresco y placido...:)
ResponderEliminarPues no, no es lo mismo. Hay categorías y niveles, familias y especies, estados y devenires.
Eliminar;)
Hay que, hay que, hay que... ¿Y sí te dejas estar? Aunque sea por un ratito, dejar que el gris campe a sus anchas por los rincones de tu ser, dar el pendulazo hacía el otro estado de ánimo, el prohibido, el temido... Bajadas y subidas, una tras otra, hasta que poco a poco (risa a risa, lagrima a lagrima) el péndulo se detiene en el punto intermedio (el equilibrio).
ResponderEliminarYa... ni idea, ha salido esto y no pienso borrar nada, ahí se queda.
Si te enteras, me lo cuentas.
Un abrazo (sin conservantes, ni colorantes)
jajajaja me voy enterando, pero a ver cómo te lo cuento xD
Eliminar(abrazo recibido)
Hola Rain, estoy intentando ponerme al día con mi blog y los vuestros, este conflicto que estamos viviendo me supera y cada vez huele más a podrido,de ese aire del que hablas en tu blog necesito yo, aire para respirar porque me ahogo, me axfisio, esto se enquista de tal manera que....
ResponderEliminarTe dejo mi abrazotedecisivo y ya de vuelta por aquí, que gustazo.
Sip. Están los aires algo irrespirables. Una vez más te lo vuelvo a decir: hay que seguir en la brecha, amiga.
Eliminarun besote
Esta canción era uno de mis hits de infancia. La cantaba constantemente.
ResponderEliminarNo tengo mucho que decir, nada más que mandarte un gran soplido, tibio, al menos! :)
y besos!
(y un abrazo, por si hace falta)
Uy, menuda generación de mecaneros xD
EliminarGracias.
muacks!
Raindrop, ¡sal ahora mismo de esa zona pantanosa, amigo mío! Busca un pradito verde y aromático, una playita donde corra una agradable brisa marina. Un kit-kat bajo la sombra de un enorme árbol, unas risas con la "pandi", llama a una de tus ninfas, porque si no te voy a cantar eso de:
ResponderEliminarAire,soy como el aire,
pegada a ti siguiéndote al andar...
Y no veas lo que desafino xD
Besitos y más abrazos.
jajajaja me dejas con las ganas de escuchártelo cantar ;)
Eliminarbesitos
Una vez tuve la oportunidad de subir a un globo de éstos con un grupo de escolares. Mientras sobrevolábamos una ciudad cercana a la mía, Patrimonio de la Humanidad, el "comandante en vuelo" nos explicaba de una manera técnica y precisa su funcionamiento, desde el principio de fluidos de Arquímedes hasta las características del tejido del globo, ¡pura química! en contraste con la imagen que veíamos desde arriba, ¡pura emoción! Si consideramos que el aire es un fluido lo importante es conocer la fuente que lo genera y saber cuándo y por qué fluye, que ya vendrán otros vientos que nos llevarán a saber dónde.
ResponderEliminarBesos.
Qué envidia me ha entrado, Ana.
Eliminar:)
Oooops, lo del globo me da mal rollo. Padezco mucho de vértigo y si no me siento seguro... mala cosa. No sé, no creo que lo disfrutara.
Eliminarbesos
Yo también subí una vez a un globo en el cole. No sé cómo en la fiesta de fin de curso trajeron un globo al patio y aunque tuve que hacer mucha cola pude subir. No nos elevamos mucho y bajamos enseguida, pero oye, no mucha gente puede decir que haya subido en globo en Madrid :)
ResponderEliminarBueno, ese globo parece que se separó menos del suelo. Quién sabe... por ahí quizás me animara a empezar con eso de las ascensiones aerostáticas ;)
Eliminarhttp://youtu.be/hAxiPFE6pqM
ResponderEliminarhttp://youtu.be/Dp0b0svvp8s
ResponderEliminarY muchos besos
muchas gracias
Eliminary
muchísimas gracias
Me traes aire fresco y eso se agradece :)
muaaaaacks!
Me encantaría realizar un viaje en globo. Sería maravilloso contemplar parte de nuestro mundo desde arriba sintiendo la brisa en la cara.
ResponderEliminarEstupenda entrada amigo. Te felicito!! ; )
De contemplar el mundo, mejor desde el espacio exterior. Quizás esa sea la mejor perspectiva ;)
EliminarGracias ^^
Me encanta. Un golpe de aire fresco entre líneas.
ResponderEliminarSds
Gracias :)
Eliminarbesos
Upps! Estas etapas grises hay que dejarlas pasar, al final no sé como pero calentamos el aire, supervivencia supongo.
ResponderEliminarBiquiños
Sí, creo que es una cuestión de supervivencia. Buscamos aire respirable.
Eliminarbesos ^^
Yo que tomo muchos aviones, cuando me siento verdaderamente bien es cuando aterrizo, pero comparto tu metafora, tomar cierta altura es bueno y ayuda a ver las cosas con la perspectiva adecuada.
ResponderEliminarEs el sentido metafórico el que me importaba, porque también soy un gran amante del suelo firme jajaja
Eliminarun abrazo