En la obra "Julio César" de William Shakespeare, en el acto 4, escena 3, Bruto le dice a Casio:
"Hay una marea en los asuntos de los hombres, la cual, tomada en pleamar, conduce a la fortuna; pero, omitida, todo el viaje de la vida está lleno de escollos y desgracias. En esa pleamar estamos ahora a flote; y debemos aprovechar la corriente cuando es favorable o perder nuestro cargamento".
Los días tienen la mala costumbre de descontrolarse. En realidad, el control es tan solo una efímera ilusión. Iluso es aquel que cree que controla sus pasos, cuando lo cierto es que todo escapa al control. Sin embargo, qué necesaria se hace en ocasiones la sensación de dominio de la propia vida.
Los días tienen la mala costumbre de descontrolarse. Empero, en su descontrol suelen abrir una rendija para que el navegante al menos pueda percibir sus mareas.
Hay una marea en los asuntos de los hombres...
Quizás fuera la mejor de las ideas no desperdiciarla en la pleamar, cuando el momento es favorable. Porque llegarán también los días difíciles.
Cómo no. Los días son así: tienen la mala costumbre de descontrolarse.
Aprovecho los vientos y las mareas. Me aferro a la buena corriente.
Sacudido por las olas, pero no hundido.
Iván Konstantínovich Aivazovski:Буря на море лунной ночью (Tormenta en el mar en una noche de luna llena) |
Es que hay gente muy cabezota que se niega a adaptarse. Luego se estrellan.
ResponderEliminarLos acantilados rocosos siempre esperando su oportunidad.
Eliminarun saludo
Lo único que podemos controlar es la forma en como afrontamos la vida ue nos toca vivir
ResponderEliminarY eso algunas veces tampoco sale como se desea. Pero...
Eliminarbesotes
Agarrate fuerte raindrop, que las corrientes, si sabemos llevarlas no hunden "sólo" nos arrastran, ¿adónde?? eso está por descubrir, siempre nos esperan sorpresas...
ResponderEliminarUn beso!!
Ahora queda por ver hacia dónde arrastran, qué sorpresas aguardan.
EliminarQue sean buenas.
besos
Los clásicos (y la vida) enseñan tanto.
ResponderEliminarSiempre a flote.
Son auténticas cisternas de sabiduría.
Eliminarsaludos
cierto que el control (aunque sea imaginario) nos da seguridad. Muestra de ello las rutinas en un bebé le hacen crecer feliz... pero dejarse a veces arrastrar por la corriente, por el viento inesperado, no siempre es negativo... a veces son corrientes de pasion, de amor, que vividas al minuto, dan un rumbo nuevo a nuestro barco. Un beso fuerte.
ResponderEliminarDe hecho, Shakespeare insinúa (en palabras de Bruto) que so deseables esas corrientes que se siguen en la pleamar. No todas las corrientes que arrastran han de ser negativas.
Eliminarbesotes
De la Naturaleza se aprovecha todo, hasta la pleamar si es necesario...agarrar con demasiada fuerza el timón es agotador, el desgaste es enorme, a veces conviene soltar lastre, de todas formas al final volvemos a reconducir, tenemos esa tendencia, los días se descontrolan y nosotros luchamos por controlarlos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es una lucha constante entre el control y el descontrol. Eso parece.
Eliminarbesos
Si usamos esa metáfora yo me veo más como uno de los remeros de las galeras en "Ben Hur". Me da un poco igual adonde vayamos o el tiempo que haga fuera y hasta cierto punto tampoco me importa que hundan el barco. Total, si sobrevivo al naufragio sé que me meterán en otro barco igual.
ResponderEliminarNo está mal llevada la comparación. Aunque imagino que, a muchas personas, el ser conscientes de que esa puede ser su realidad les debe de resultar tan demoledor que entonces tratan de imaginar que controlan el devenir de sus vidas.
Eliminarbesos
Sr. Empero; menos mal que siempre hay un empero.
ResponderEliminarQuizás algún día llegue a enterarme de si tu problema es con las conjunciones adversativas, con la variedad de léxico o (simplemente) con la palabra empero.
EliminarLa eterna lucha del mar que pone al descubierto una realidad: El secreto que se esconde en el tiempo que dura ese fluctuat nec mergitur, voy a transformar una frase de Francisco Antonio García Romero:” Mar es el mundo en el que los humanos como nave en el piélagos puede ser batida por la tempestad pero no se va a pique".....................somos náufragos agarrados a un salvavidas..............pero ¿ Habrá para todos?
ResponderEliminarPor cierto, ¿sabes que "Fluctual nec mergitur" es el lema de la ciudad de París (y así consta en su escudo)?
Eliminarbesos
No, no lo sabía, nunca acaba el día sin que aprendamos algo nuevo.............
EliminarMuacks!!!
Sacudidos por las olas pero no hundidos...gran final a esta maravilla de post...los malos y buenos tiempos siempre vienen como las mareas...que esas fuerzas que ejercen la luna y el sol siempre te fortalezcan y te envuelvan con ternura y coraje para que jamás te hundas.
ResponderEliminarMi abrazotedecisivo y buena semana Rain.
Los malos y los buenos tiempos como las mareas. Sí. Como la marea que se toma en la pleamar o en la bajamar. Hay que tenerlo muy en cuenta.
Eliminarbesos
No creo que todo escape a nuestro control, pero sí que un día puede descontrolarse todo.
ResponderEliminarSon cosas de la entropía. Creo que la Naturaleza favorece lo que los humanos estimamos como descontrol.
Eliminarbesos
Soy de los que prefieren improvisar, esperar sorpresas, nunca buscar, sólo encontrar... como el amor que llega de repente y te hace perder el control.
ResponderEliminarabrazos!
jajaja sí, también eso hace perder el control. Bueno, si es que alguna vez se tuvo.
Eliminarabrazos
Yo lo único que espero es que el tiempo no improvise para nada malo. Espero que todo te vaya bien.
ResponderEliminarBesos!
Gracias por tus buenos deseos, preciosa.
Eliminarbesos
Cuanto más control ejerzamos, más nos decontrolaremos porque no somos pequeños dioses
ResponderEliminarque todo lo pueden, sino hombrecitos y mujercitas que navegamos como venga.
Hay tiempos de bonanza y todo fluye, otros momentos en los que nos hundimos o hacemos agua.
Y así es la vida: cíclica.
Hermoso tema para acompañar las reflexiones.
Abrazo.
Vivir al día sin preocuparse de donde te arrastre la corriente. Besos mi querido amigo.
ResponderEliminarA veces por no decir la gran mayoría de veces ocurre que si has hecho x planes esos planes se van al traste uno detrás de otro. No nos queda otro remedio que sabes vivir con los vaivenes de la vida y del día a día.
ResponderEliminarAbrazos y biquiños
Buenas noches, alguien me podría indicar el autor del cuadro marino con el barco que ilustra ésta página?
ResponderEliminarMe interesa mucho saber su autor. Efectivamente, Fluctuat nec mergitur es el lema o "Devise" de Paris desde el miltrecientos y pico por la gran importancia del transporte fluvial en el auge de la ciudad Gala. SU imagen es actualmente la de aquella época si no recuerdo mal....Una nave de un mastil encima de un pequeño mar azul y encima una banda con flores de lis. Cambió varias veces el escudo pero al final se volvió al primero. En su día investigué porque tuve la suerte de criarme en una de las calles que considero de las más bonitas y céntricas de Paris. Aunque como se están poniendo las cosas ahora, mejor que me hubiera criado en el campo y en el sur de Francia porque me saldría más barato volver....Llevo ya tiempo sin asomar la nariz por allí, y al paso que vamos en casa, me va tocar cantar el tango "volver" de Gardel cuando logré cruzar el campo de marte y saludar de nuevo a la Tour eiffel, como antaño lo hacía todas las mañanas siendo niña, como se saluda a una amiga....snif...Saludossssssssss
Hola, EmiliaR.
EliminarSí, fallo mío, que no lo había puesto antes (ahora ya he subsanado esa carencia). El cuadro es del pintor romántico ruso Iván Aivazovski (1817-1900) y se titula "Tormenta en el mar en una noche de luna llena". Un título muy descriptivo, obviamente ;)
Sobre el lema de la ciudad de París, todo correcto. Aquí, el escudo de la Ville Lumière.
Un saludo