jueves, 10 de noviembre de 2011

hallazgo

(área de descanso nº 157)

Me he encontrado una horquilla. De esas del pelo.
Esperando a quien no acaba de llegar, me he sentado cerca del edificio de la biblioteca en un coqueto banco de piedra de los que flanquean la avenida del campus de esta universidad. Y, mirando hacia ninguna parte en concreto pero concretamente hacia el suelo próximo a mis pies, la he visto allí tirada sobre el pavimento gris: una horquilla de las corrientes, sin adornos. Apenas tonos dorados, pero ni una florecilla, ni una estrellita, ni una figurita, ni una filigrana que revelen algún dato más en que pudiera espaciarse la imaginación. Tan desnuda de adornos aparecía esa horquilla ante mis ojos que ni siquiera la fina hebra de un cabello resplandecía entre sus fauces metálicas. En definitiva, ni una pista para reconstruir el suceso: ¿por qué una horquilla decidiría independizarse para acabar suicidándose de semejante manera? ¿O fue víctima de un abandono premeditado?
Imposible saber nada de su propietaria. Al menos, un cabello revelaría datos de la mujer que llevaba esa horquilla. Muy pocos datos a simple vista, pero otros más podrían averiguarse de la gran cantidad de información genética que llega a contener un solo pelo (¡qué tiempos estos en que resulta así de fácil acceder a algunos de nuestros secretos tan bien atesorados en el críptico código de los nucleótidos!). Sin embargo, por más análisis que pudieran hacerse de un sencillo filamento abandonado, estos nunca revelarían las cosas realmente importantes que hacen de esa mujer anónima alguien singular y fascinante para otra persona. Cosas como por ejemplo si le ponen triste los días de lluvia, si disfruta con la poesía de Benedetti, qué siente al contemplar el mar, qué le pareció la última película de Woody Allen, cuál es su mejor recuerdo o cuál es su sueño más recurrente, si le gusta vestir de color lavanda, si se le eriza el vello cuando escucha música de Debussy, ¿ama los gatos? ¿qué le hizo llorar por última vez? ¿cuál es su sabor de helado preferido? ¿detesta los lunes?
Infinidad de preguntas de las que solo se podría obtener la solución por boca de la mujer que extravió la horquilla. O quizás sin palabras, compartiendo tiempo a su lado para obtener las mejores respuestas y, lo que es mejor, descubriendo nuevas preguntas.
Sigue el suceso desdibujado en conjeturas... ¿Acaso tan perturbadoras eran las emociones que bullían en esa cabeza que llevaron a la horquilla a dejarse caer al vacío? ¿Quizás fue un salto de alegría el que la alejó de ella para siempre?

Eclipse de sol sobre la horquilla. La oscura silueta de una cabeza se dibuja en el hormigón, cubriendo el objeto que ha hecho revolotear mi mente durante un tiempo que no consigo calibrar.

- Hola, ya estoy aquí.

Suena apresurada y jadeante la voz que esperaba y me arranca del ensimismamiento. Me levanto y dejo a la horquilla con sus propios desvaríos...

26 comentarios:

  1. Dando pistas sobre el perfil de la mujer que te gustaría que hubiera detrás de la horquilla.

    ResponderEliminar
  2. seguro que le ponen tristes los dias lluviosos pero justo tambien los espera para mirarlos resguardada detras de el cristal... querra envolverse o ponerse una frazada encima de las piernas beber un chocolate caliente y recogerse el cabello
    ...

    ResponderEliminar
  3. El juego que puede dar una pequeña e insignificante horquilla.
    Y pensar que su dueña tal vez ni se haya dado cuenta de que la ha perdido, ni pueda imaginar todos los pensamientos que ha desatado.

    Besos.

    ResponderEliminar
  4. Eres un romántico raindrop, a lo mejor si vuelves a ese banco otro día encuentras a la dueña de la horquilla, tal vez sea una chica que busque soledad y se tumba en banco para apartarse del bullicio y mirar el cielo.

    ResponderEliminar
  5. Una entrada a la que nos nos tienes acostumbradas, últimamente estás más romántico...¿se debe, acaso, a la presencia de alguna fémina en tu vida? (sé que no responderás, ahí lo dejo). Me gusta tu nueva faceta. Pareces más humano.

    ResponderEliminar
  6. Si se prenden las horquillas en la ropa como hago yo no es extraño que se pierdan.
    De todas formas, sal más amenudo a que te de el aire porque sino cada cosica que veas en el suelo te va a inspirar un mundo. Te veo todo el día escribiendo como un poseso, será el otoño, que te vuelve un romántico.

    ResponderEliminar
  7. Si con una horquilla escribes así de bonito ¿Que escribirías si te encontraras una chaqueta o...?
    Un beso

    ResponderEliminar
  8. Ya ves la cantidad de historias que pueden envolver a una simple horquilla. Fijate, solo con el solitario pelo que habia podias deducir si era rubia o morena, que a ti eso se te da de maravila jaja :P

    Besitos.

    ResponderEliminar
  9. Por cierto si la horquilla es de tonos dorados es más posible que se trate de una rubia o castaña clara, las de pelo oscuro suelen usar horquillas negras.

    ResponderEliminar
  10. Eres un genio Raindrop, un genio...sean los gustos que sean los que tuviese la propietaria de la horquilla...seguro que le hubiese encantado compartirlos contigo.
    A mi me ha encantado que nos regales esta pedazo de entrada, está lloviendo y como no me gustan demasiado los días lluviosos (sobre todo los de noviembre)la he disfrutado doblemente jejeje.
    abrazotedecisivo

    ResponderEliminar
  11. 11·11·11
    vamos allá

    Montse
    jeje soñar es gratis.
    Pero hay cosas que sí y cosas que no, todo mezclado. Y... la gracia está en las mezclas ;)
    besos

    Jo
    Cuando haga ese gesto de recogerse el cabello, quizás note que le falta una horquilla.
    Esa horquilla ^^
    besos

    Pilar
    Desde siempre, me ha parecido que los objetos conservan algo de la vida que han ido capturando de sus propietarios. No puedo evitar que una simple horquilla me lleve a un sinfín de pensamientos ^^
    besos

    Sonja
    Es posible, es posible.
    Mira, otra cosa que se puede deducir de las pocas pistas que hay.
    :)
    besos

    aina
    jajaja ¿y antes? ¿más robot? xD
    bueno, ya sabes que solo responderé en presencia de mi abogado ^^
    besos

    Cris
    jajajaja escribiendo no, pero pensando sí: tooooooodo el santo día dándole vueltas a cualquier minucia. En eso sí que soy irreductible ;)
    besos

    reina
    ehmmm... pues no sé... cada objeto tiene su vidilla. Ver a esa pobre horquilla ahí abandonada me ha traído un montón de evocaciones.
    besos

    Sandra
    jajajajaja sí, ya sabes que para eso de asignar un color de pelo soy infalible... jeje qué desastre xD
    besos

    Sara
    Ya sabes que para mí siempre es un placer compartir estas divagaciones que se me van ocurriendo ^^
    besos

    ResponderEliminar
  12. Tal vez las respuestas no fueran tan fascinantes como tus preguntas.
    Besitos.

    ResponderEliminar
  13. La horquilla ya no contiene el adn de quien la dejó librada a su suerte, ahora está cargada del adn de raindrop, quien se atrevió a mirarla con esos ojos curiosos, sedientos de historias, de preguntas y de respuestas.

    La horquilla ahora habla de ti y de las cosas que te gustaría encontrar en la mujer que llevaba esa horquilla.

    Y seguramente pronto la cogerá del piso la mano de alguien que luego andará rastreando tus pistas.

    Tu prosa me deja prendida (ya te lo he dicho, pero no me canso)

    ResponderEliminar
  14. Se me ha perdido una horquilla, por favor si alguien la encuentra le estaré muy agradecido si me la devuelve. No es que sea una gran cosa, es muy común pero para mi tiene un gran valor sentimental.XDD

    Raindrop eres único amigo. Jajajajajaa... como dicen en mi barrio, "molas". ^_^

    ResponderEliminar
  15. Me dejas sin palabras, si una horquilla es capaz de inspirarte así...... luego me "riñes" por que te llamo maestro.

    Besitos

    ResponderEliminar
  16. Últimamente lo pierdo todo. Jamás hubiera encontrado mi horquilla a no ser por ti. Gracias!

    Me pongo triste cuando llueve en mi interior. Me derrite Benedetti. La pregunta sería, qué siento al no poder contemplar el mar? No he visto la última de Woody Allen. Mis mejores recuerdos son quien soy ahora. Tengo una camiseta color lavanda. Debussy eriza en mí todo lo erizable. No termino de entender a los gatos. El vacío me hace llorar continuamente. Turrón. No detesto los lunes y adoro los miércoles.

    Maravilloso, siempre.
    Besos

    ResponderEliminar
  17. Qué gran ejercicio para un narrador. Imaginar toda una historia detrás de una horquilla!!

    ResponderEliminar
  18. Caray, mira que te ha dado de sí una simple horquilla ;)

    Muaks!

    ResponderEliminar
  19. Samotracia
    Es una posibilidad. Pero imaginar otras posibles respuestas también es fascinante :)
    besos

    Daniela
    Me asombra esa facilidad que tienen los objetos para cargarse con la esencia de las personas que se detienen en ellos.
    Y muchas gracias por el cumplido.
    besos

    Vicky
    Es posible que la haya encontrado.
    La horquilla y muchas respuestas ;)
    besos

    harrygoaz
    Y ahora toca pasar una buena semana.
    a hug

    Sory
    jajajaja es que sigo aprendiendo, pasito a pasito, como cualquier alumno. Lejos de ser un profe.
    Gracias y besos ^^

    River
    Oh, sospechaba que las respuestas serían encantadoras, pero ahora mi sed insaciable me lleva a nuevas preguntas que obtendrán respuesta para seguir repitiendo este juego de ida y vuelta.
    Tengo tu horquilla.
    Y gran recompensa la que me das por un diminuto trocito de metal :)
    besos

    Marijo
    Y cómo me gusta dejar volar la imaginación. Es uno de esos ejercicios que siempre me satisfacen ^^
    besos

    Aliena
    Pues lo cierto es que sí, me ha dado más juego del que me parecía a primera vista jajaja
    besos

    ResponderEliminar
  20. Ejemplo este, minimalista de aquello de si la inspiración no viene salgo a su encuentro. Cuanta vida y pensamientos de una sola horquilla, debe estar orgullosa.

    ResponderEliminar
  21. Un texto excelente, rico, poético, ingenioso. Me ha gustado especialmente, me ha parecido brillante el desarrollo a partir de una simple horquilla que tiene presa la representación de una maravillosa mujer.

    ResponderEliminar
  22. Maeglin
    Cualquier pretexto es bueno para aventurar unas letras ^^
    abrazos

    Sergio
    Gracias por una valoración tan amable.
    abrazos

    ResponderEliminar
  23. Y va a ser la segunda vez en menos de 15 min que repita comentario en tu blog pero es que... ¡me ha encantado!
    Si es que dan ganas de ir dejando horquillas abandonadas para que la gente haga esas reflexiones...

    ResponderEliminar
  24. EH! Una horquilla sencillla SÍ te dice cosas de la persona que la ha perdido: que es una chica práctica que no necesita florituras y que posiblemente ha salido con prisas de casa (y por eso se ha puesto mal la horquilla y se le ha caido). Eso sí, no te revela si odia o no lo lunes, un dato básico sobre cualquier persona XDDDDDDDDDD

    ResponderEliminar
  25. Y aqui pareciera que preguntas por ti, pero de una forma como si no supieras que se trata de ti. O como si "ti" se hubiera dibujado, delineado y quizas en alguna cosa hasta casi-casi definido a partir de la poseedora de las respuestas a estas preguntas.
    Por otro lado hay un no-sé-qué del principito en la voluntad de cuestionar. Dulce e inocente principito quien, para desconsuelo de su amigo zorro, no pertenecia a este mundo.

    ResponderEliminar

Sin tu comentario, algo importante le faltaría a este post.

Gracias por mejorarlo :D