jueves, 20 de junio de 2013

esparadrapo

(etapa 29.13)
"¿Has tenido alguna vez miedo de meter a alguien tan adentro, que sabes que no podrías volver a arrancarlo de ti
sin desgarrarte, sin perder parte de ti al hacerlo...?"
(frase en el encabezamiento del blog de mi amiga Avellaneda)

Un trocito de tela impregnado con adhesivo en una de sus caras. Nada más que eso. El invento se pega en la piel. No sobre la herida, que quedará protegida por algo menos agresivo que el pegamento, pero sí en la zona adyacente, que también grita por la proximidad de la lesión.
La cara externa de la tela irá pillando mugre con los roces, los trajines de la jornada, las salpicaduras de la vida. La cara interna, mientras, cumplirá su misión de sujetar carnes, trocitos de lienzo, gasa, algodón o lo que sea, todo el tiempo en que la llaga se va curando. El pegamento se hace tan amigo de la piel en torno a la herida que ya no se distingue con facilidad dónde termina uno y empieza la otra. Fundidos en el dolor vecino, bien avenidos por las circunstancias.
¿Cuánto puede durar semejante unión?

Llega un momento en que hay que quitarse el esparadrapo, hay que desnudar la cicatriz incipiente. Ahora ya es un trozo de piel que hay que arrancar. Es piel que no siente, pero casi, porque la de verdad está ahí pegada. Piel que ha ido absorbiendo pegamento como si fuera más tejido cutáneo.
Quitarse el esparadrapo. Dos opciones. Duelen ambas. Quizás una más que la otra, resultado de combinar intensidad y duración. Hay quien opta por arrancarla poco a poco, tirando poro a poro, pelo a pelo. Son diminutos desgarros, pero la suma final es tremenda y el resultado en dolor puede ser más duradero.
La mejor opción suele ser desarraigarlo de un tirón. Todo a la vez. Un gran desgarrón, un solo alarido, un solo escalofrío recorriendo la espalda, un coro de terminaciones nerviosas gritando al unísono. Un instante. Y nada más.
Luego, el vacío del silencio.

33 comentarios:

  1. Hay otra opción para expertos, en la ducha, o con algún aceite, ya sabes que el aceite ayuda en todo.
    El secreto está en la tirita que te compres jajaja

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jajaja creo que es eso: la tirita xD
      muacks!

      Eliminar
    2. Realmente no hay una forma fácil de quitar un amor del alma, ni lento ni rápido, pero no hay una sensación más intensa que el amor y el desamor, cro que es el creador de grandes versos, libros canciones y frases, nada tan intenso les sale a lax personas que no sufren

      Eliminar
    3. ¡Qué cierto esto que dices!
      besos

      Eliminar
  2. Consciente de que el tirón es la opción más efectiva y menos dolorosa en su conjunto, acabo decantándome por hacerlo lentamente y, sólo al final, quizá agotado por el delicado martirio, acabar con un golpe de gracia para poner fin a tanta agonía. Podríamos ahorrarnos la primera parte.

    Cuídate (más).

    P.d Fantástico tema el de TfF, lástima que lo eclipsara lo más célebre del resto del álbum.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo que el álbum "The seeds of love" no tiene desperdicio. Cuando lo publicaron, hace ya un montón de años, me causó un impacto tremendo.
      Me cuidaré :)

      Eliminar
    2. Me disculpará usted la corrección, pero si no recuerdo mal este tema estrenaba la cara B del mítico "Songs from the Big Chair", aquel que incluyó las refamosas "Shout", "Everybody wants...".

      "The Seeds of Love" es muy bueno también aunque un gran desconocido; por cierto, suena a Beatles.

      Me alegra que te cuidas, así debe de ser.

      Eliminar
    3. Faltaría más: disculpadísimo, porque ha sido un lapsus mío jajaja
      Nada de "The seeds of love", ese álbum vino después y fue el que me enganchó ya sin remisión a los Orzabal&Smith. No sé si a Beatles, pero suena absolutamente genial. Es de una elegancia que me alucina.
      :)

      Eliminar
  3. La gran característica del esparadrapo es esa capacidad de unirse a uno y mimetizarse con la piel. Conseguir que esa herida quede protegida casi al 100% y de forma discreta.
    Le doy prioridad a la función que tiene y a su gran eficacia a pesar de saber la castaña que será quitarlo. Los pros superan con creces a los contras!

    :D
    Soy una apasionada del esparadrapo como buena hipocondríaca que soy.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El esparadrapo es útil, claro que sí. De más de un apuro ha sacado xD
      jajaja "apasionada del esparadrapo" ¡buenísimo! ^_^
      besos

      Eliminar
  4. También puede abrir una herida casi cerrada.
    Un gusto leerte.
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso si se tira con muchas ganas y en plan caiga quien caiga xD
      besos

      Eliminar
  5. En mi botiquín hay tiritas, gasas, esparadrapos que me pongo para casos necesarios, cuando me los tengo que quitar prefiero un solo tirón, aunque doloroso,...........y a esperar que cicatrice.

    Besos

    .

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jeje el método tirón...
      Lo más inquietante del esparadrapo es que nunca sabes qué es lo que te vas a encontrar debajo de la tela una vez que la has retirado.
      besos :)

      Eliminar
    2. Prefiero retirarla y ver, que pensar que es lo que me puedes encontrar.

      Besos Rain!!!!

      Eliminar
  6. No he podido pillar la metáfora, la entrada no ha hecho más que recordarme cuando me pille la mano con la trituradora. Tenían que cambiarme el esparadrapo cada día y veía las estrellas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Uf, menuda experiencia tuvo que ser aquello.
      Normal que el esparadrapo te traiga otros recuerdos menos metafóricos.
      besos

      Eliminar
  7. Fijate todo lo que se puede escribir a partir de una curita -como la llamamos aquí- o de un esparadrapo.
    Ante una herida física ocurren esos pasos que describiste tan bien.
    Yendo a la metáfora, hacemos lo mismo con las heridas invisibles a los ojos.
    Me gustó mucho, Raindrop.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Con las heridas del alma también se corre el riesgo de que se abran un poco al retirar los esparadrapos.
      besos

      Eliminar
  8. Al ver la cita me he quedado sin palabras :) Esa frase me acompaña desde que hace unos años alguien me la dijo y revolucionó todo lo que creía conocer. Pero parece que es cierto que todo tiene un final. Decidí quitar esa "tirita" de un tirón y al hacerlo me sentí tal cual, perdiendo parte de mí al hacerlo. Pero no había más remedio porque no soy de las de ir quitándose las cosas poco a poco.
    Luego se vive con la sensación del miembro fantasma durante un tiempo largo, el tiempo va cubriendo el recuerdo pero de vez en cuando esa cicatriz aún duele pero con un dolor dulce.
    Gracias por la cita que he intentado reflejar alguna vez en algún poema pero que aún me cuesta...

    Un beso enorme amigo (me ha emocionado que me consideres así :))

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es una cita que recuerdo desde hace años, cuando la leí en la cabecera de tu blog. Y me impactó con fuerza, por lo real, por lo cruda, por lo bien que expresa el dolor y las emociones cuando te desprendes de lo que ya es un trozo de ti mismo.
      ¿Y cómo no te voy a considerar amiga, con lo que llevamos recorrido por estos andurriales? :)
      besotes

      Eliminar
  9. Tirón, siempre mejor dar un tirón y acabar con el sufrimiento. Y digo lo que Pseudo, bonita metáfora

    ResponderEliminar
  10. Hola Rain!!!
    un día me hice un corte de casi diez cm en la pierna derecha y yo que soy peludo, ya puedes imaginar el tironcito que me dieron para quitar el trocito de tela pegado.... lo hicieron lento y disfrutando con mi dolor eterno... putas amigas que tengo!!! ajjaja!!!

    pero leyendo entre líneas, que creo que vas por ahí, el dolor es aún más indescriptible.

    abrazos!

    ResponderEliminar
  11. Luego toca limpiarse intensamente los restos oscuros de la goma pegada. No, no es tan fácil quitarse un esparadrapo, ni literal ni metafóricamente hablando...
    Ánimo, si es el caso...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues es verdad, la cosa no se acaba después de quitar el esparadrapo. Aún quedan cosas que poner en su sitio. Pero, de momento, qué alivio.
      Gracias :)
      besos

      Eliminar
  12. El esparadrapo está bien, tiene esa función de proteger mientras la herida se cura. Pero a veces parece que nos acostumbramos al esparadrapo y no nos atrevemos a dejar que la postilla respire. Las heridas necesitan, cuando están cerradas, respirar. Cuando retiramos el esparadrapo, después de mucho tiempo, la piel que protege está reblandecida y durante un tiempo débil, pero pronto se hace fuerte. El esparadrapo es secundario y debe ser retirado tarde o temprano. Lo difícil es saber el momento adecuado. El modo... tirón sí o tirón no... ¡como se nota que nunca te han hecho la cera! Sino te iba a dar igual un tirón más o un tirón menos :P.


    ¡Un muak del tirón!


    PD. Si el esparadrapo es este blog, por ejemplo, borra todo lo que he dicho y quédate con el esparadrapo 4ever&ever!! ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jeje no, el esparadrapo no es el blog. Aunque ahora estoy pensando que también se podría aplicar.
      Todo un mundo, los esparadrapos xD
      besos

      Eliminar
  13. El dolor comienza antes, justo cuando tenemos que echar mano del esparadrapo para curar una herida, "nada sale gratis, amigo" diría él. En positivo: si ha contribuido a paliar una herida mayor, bienvenido el tirón. En negativo: si la analizas con lupa, la vida es un auténtico drama.

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El dolor y la curación, siempre de la mano. Si no es el tirón del esparadrapo es el sabor amargo de una medicina o el pinchazo del remedio que se inyecta. Parece que para estar mejor, antes hay que sufrir. Sí, la vida tiene mucho de drama.
      besos

      Eliminar

Sin tu comentario, algo importante le faltaría a este post.

Gracias por mejorarlo :D