(47ª parada)
"Vienen siete años de gran abundancia en toda la tierra de Egipto. Y tras ellos seguirán siete años de escasez; y toda la abundancia anterior se olvidará (...)".
(Libro del Génesis, cap. 41: 29-30)
Las personas han aprendido a leer dentro de nosotros la música de nuestra vida de la misma forma que la aguja de una gramola recorre los surcos de un disco. Lo llaman dendrocronología (como siempre, enormes palabras que las personas utilizan para las cosas que se van encontrando) y el desarrollo de esta ciencia le ha quitado parte de su secreto a los grandes y viejos hermanos. Para los que hemos estado siempre a su lado, no es un misterio conocer sus cambios ni las causas que los provocaron... cada aparente cicatriz es una parte de su historia, tantas veces compartida. Algunos de esos cambios son tan evidentes como el endurecimiento de sus cortezas, la inclinación de sus troncos, las podas accidentales y las otras, la forma de sus ramas o la sucesión de sus brotes y renuevos. Otros avatares han quedado ocultos bajo las capas que el tiempo materializa.
Cuando cae un hermano, los expertos leen los anillos de su interior. Si los anillos se encuentran claros y muy distanciados, es muestra inequívoca de bonanza, de los buenos tiempos vividos. En la oscuridad de los más apretados se leen las sequías, los incendios, las inundaciones, las enfermedades...
Llegará el día en que derribarán a mi compañero y leerán en su interior. Allí descubrirán un anillo sombrío, comprimido y desdibujado, como un jeroglífico incrustado en medio de los demás. Y no es otro que el anillo que se desprendió de su dedo y que ya había dejado antes un registro de luces y sombras en otros siete anillos internos.
Hay unas setas gigantes, que por su forma recuerdan los anillos del arbol. La diferencia es que son más "aparentemente frágiles" y cuando el viento sopla fuerte sus hojas interiores se mueven.
ResponderEliminarUn jardín zen vivo, cambiante a golpe de "soplo"
Malos tiempos corren para la abundancia y la prosperidad...pero no sólo económica, no, sino esa otra prosperidad de relaciones, de amistad y sinceridad , de ese caminar por la vida en soledad...y...cuando llegue el día, en que derriben a tu compañero y lean en su interior, estate cerquita de él Raindrop... y haz una lectura positiva de esos siete anillos de vida, de mucha vida.
ResponderEliminarMe ha encantado tu entrada, da para muchísimaaaa reflexión, lo he leído 3 veces y las tres me sugirió algo diferente, me quedo con esta apreciación.
Un abrazote
Tu 47ª parada es preciosa aunque eso de que llegará un día en que derribarán a tu compañero y descubrirán un añillo sombrío, es tan triste...
ResponderEliminarDe todas formas me ha gustado. Ya sabes amigo, como siempre.
y otra cosita:En el diccionario no aparece "dendrocronología" ¿no te lo habrás inventado? XDDD
Las personas han aprendido a leer dentro de nosotros la música de nuestra vida que poética frase Raindrop!
ResponderEliminarNo sé, cuando derriben al compañero y vean sus anillos y descubran ese anillo sombrío puede que también se asombren porque ése era la base para muchos otros anillos posteriores luminosos, espaciados, alegres y, sobretodo, plenos
Una preciosa fábula que abre miles de posibilidades...
Aquí en Madrid, en un barrio obrero al borde de la apoplegía porque (creo) ¿hemos pasado cuartos? en serio, no lo entiendoooooo
Besos futboleros muy a mi pesar :-p
Pues si...ya que el anterior comentarista hace referencia..sí, hemos pasado cuartos! a la semifinal! por fin!
ResponderEliminarY si ahora se vieran los anillos de la selección, el surco que se ha creado creo que podría ser hasta cuadrado!!
Preciosa entrada, bonita interpretación y...existe o no la palabreja??
:-)
un bico! vecino!
gracias x todo
Ojalá se pudiera aplicar la dendrocronología a las personas.
ResponderEliminarPero las personas no necesitan que profundicen en sus anillos.
Poseen una corteza a la que fluye el interior cuando se toca.
O cuando se expresa.
¿De qué lúcido anillo han brotado tus palabras hoy, amigo?
Un abrazo.
susana
ResponderEliminarNo conozco esas setas de las que me hablas... Con la descripción que haces, creo que es digno de verse.
besos
sara
Hay tiempos en que todo va sobre ruedas y otros en que el panorama es un poco más árido.
Siempre estoy cerca de ese compañero: lo veo todas las mañanas en el espejo :D
besos
siberia
Sí que puede parecer triste, pero sólo es un recurso literario. Al fin, todos acabamos cayendo, pero no hay que pensar mucho en eso.
jajajja la palabreja existe, de verdad. En el diccionario no se incluyen muchos términos específicos, pero que los profesionales de turno utilizan a diario.
besos
avellaneda
El futuro siempre es incierto. De momento, sólo se pueden leer las huellas del pasado. Como algunos aseguran: el tiempo lo dirá... :D
Parece que sí, que ya estamos en semifinales... qué cosas
besos
aurora
jajajja un surco cuadrado XD
para que las generaciones siguientes puedan decir: ¡¡es posible pasar de cuartos!!
De verdad de la buena que la palabreja existe :D
Me alegro mucho de volver a leerte
besos
ybris
Es cierto, las personas tenemos una corteza bañada de palabras y de imágenes que puede ser todo lo permeable que permitamos.
Pero por un día me hice árbol para contar mi propia experiencia, escrita en un libro de páginas anulares.
un fuerte abrazo
Curiosa foto. Si me hicieran un corte similar tendría un aspecto parecido. Anillos gordos y otros muy finos. Bastantes cicatrices y un final reverdecido, pero no soy un roble. ¿Llegaré a chopo?
ResponderEliminarMuy bonito. Tan inspirado como siempre.
Fuerte abrazo.
Es muy curioso que los árboles puedan vivir tantos años, y que guarden dentro de si mismos toda su historia (o la música de su vida...).
ResponderEliminarQuizás las personas, tengamos oculta en algún sitio nuestra propia música, y quizás algún día la puedan estudiar.
Yo solo sé, que la corteza de la que hablas, cada uno sabe hasta que punto es dura, protectora, depende de lo sensible que seas por dentro...
Ainsss, que entrada más bonita has escrito, chée!!
Besos
¡¡Hola!!.
ResponderEliminarLo primero, te diré que con tu post me has recordado una de las páginas del libro que estoy leyendo ahora. Se sale de tu tema pero sí que es de árboles.
(Si tengo tranquilidad hago un post no sé si más serio o con la etiqueta (etiqueta, ¿recuerdas? riso_terapia). Da para ambas cosas.
Estás inspirado, me pregunto qué aro estás viviendo en el presente inmediato.
Y, sí, la vida va transcurriendo con "aros" de fortuna o de infortunio. Y, por dentro lo llevamos, y por fuera se refleja: en la cara, en la expreión, en el carácter.
¿Qué gesto tienes ahora...?
Un beso:)
Tienes un blog muy inteligenteVolveré para seguir aprendiendo
ResponderEliminarinstigador
ResponderEliminarjajaj ahora me dejas otra cuestión... ¿con qué especie arbórea se identificará cada uno de los lectores y autor de este post? Yo aún no lo he pensado...
Voy a darle vueltas.
un fuerte abrazo
xiketä
Sólo se me ocurre pensar que lo que somos, nuestra historia pasada e incluso nuestros sueños y deseos proyectados hacia el futuro están registrados en ese súper-ordenador que es el cerebro. Los científicos se están partiendo el espinazo para desentrañarlo, pero es tarea ardua. Todavía queda mucho.
un besazo
yuria
La gente que me conoce me dice que me encuentra más demacrado. Yo creo que tienen razón.
besos
mi despertar
Siempre tengo las puertas abiertas para quien quiere quedarse un ratito conmigo.
Gracias por tu visita y vuelve cuando quieras :D
besos
Los anillos son siempre delatores. Hablan de uno mismo, escriben nuestra historia. Es inevitable, los surcos se dibujan aunque uno se intente blindar. Así es la cosa. La clave está en no dejar que los anillos apretados y febriles se queden mucho tiempo, en que podamos alternarlos con líneas espaciadas y serenas.
ResponderEliminarSiempre habrá una buena lluvia para regar nuestra tierra seca y arrastrar nuestras lágrimas.
Un post lindo lindo lindo...cuajadito de imágenes sugerentes.
Muchos besos.
Por muchos que las personas lean en el interior de la naturaleza, lo que no acaban de leer definitivamente es su cuido, el que necesita, el que esta desesperadamente pidiendo a gritos.
ResponderEliminarA que esperamos para ser mejores en todos los sentidos, ¿si tanto es que sabemos?????.
Un besazo
Ha llegado el momento de que mis anillos se vayan abriendo huecos. Hasta ahora están demasiado apretados.
ResponderEliminarNo sé con qué árbol me quedaría... pero me gustaría ser un modesto junco, por eso de que por mucho que se doble siempre acaba volviendo a su sitio: bien arriba.
Muy bonita y nostálgica tu 47 parada.
Hola "Gota de lluvia"! Hoy estoy contenta y paso a darte un abrazo.
ResponderEliminartamara
ResponderEliminarEl árbol sigue en pie. Y, como cantaban Presuntos Implicados, volverán los buenos tiempos, vencerán las ilusiones.
besos
estrella altair
Quizás se deba a que sabemos sólo lo que queremos saber, lo que nos conviene, y no lo que necesitamos saber realmente. Hay dos tipos de saber: uno útil y otro intrascendente.
besos
carmen
¡un junco! buena elección :D
Su fortaleza está en su flexibilidad.
besos
yuria
Muchísimas gracias :D
un besazo
me viene todo en imagen.. me imaginé que me hubieras contado la historia en vez de leerla yo desde lejos y entonces habia una ventana con visillo blanquito por donde entraba mucha luz (el visillo se mueve porque la ventana esta entreabierta) y yo solo escucho. En la pausa final, que no estoy segura si es final del todo o una gran plaza en pleno recorrido, creo que solo deberia darte un abrazo amistoso apretao.
ResponderEliminarhttp://es.wikipedia.org/wiki/Dendrocronología
ResponderEliminarLo primero es lo primero... la cultura al poder! qué cosas nos enseñas! Para lo de siempre la RAE... para todo lo demás... WIKIPEDIA!
Lo segundo... precioso, pero triste... Yo espero que cuando caiga descubran en mi un montón de anillos gordotes que significará que crecí y engordé sin problemas ni obstáculos porque... la felicidad está en el interior... Lee un poco a Julio... ;)
Te quiero guapo!
es genial, me ha encantado
ResponderEliminarGracias
p
ResponderEliminarUn abrazo amistoso apretao es algo muy hermoso. Lo recibiría encantado.
Ya me has alegrado el día :D
un besazo
soloyo
jajajajaj ¡qué bien funciona ese servicio de documentacióoooonnn!
Si en ti no descubrieran anillos gordotes sería una prueba concluyente de que la dendrocronología es un camelo... así que ¡al loro! ;D
En el interior hay de todo, ya sabes, bueno y malo. Pero el pasado, pasado está.
besooooossss
d2
Me ruboriza el elogio de un escritor tan excelente como tú.
Gracias a ti, por tu tiempo y tu comentario :D
(...y disfruta tus vacaciones ;D)
un fuerte abrazo
O yo estoy muuuu sensible o no sé yo que tendré ,me encantó el post Raindrop... tú si que tienes un interior bonito, aparte del exterior claro! jajaja, (veo que cambiaste la imágen del título) ejemmmmm
ResponderEliminarBesos niño, y alegría pa el cuerpo, siempre lo diré,y ya sabes a un click.
No me da la impresión que entre los árboles y nosotros haya muchas diferencias, su vida se retuerce haciendo verdaderas esculturas a fuerza de sequias,maldades provocadas, o llamas devastadoras...Su historia reflejada en esas huellas, se asemeja a cada una de las nuestras que se reflejan en los anillos del alma, apretaditos a menudo y en ocasiones, cuando sopla el viento con algo más de fuerza alentadora, relajados y dispersos...
ResponderEliminarPero siempre hay nuevos y jóvenes troncos que empiezan, ramas frágiles que bailan o lloran, más historia de la historia en definitiva...
Y cuando caiga el compañero...seguiremos aunque nos pese, formando anillos de vida...
Esta entrada ha sido preciosa Rain.. qué voy a decirte?
Un beso grande
tormenta
ResponderEliminarGracias por tus palabras, nena :D
Tienes que escribirme un día de éstos, que me parece que tienes muchas cosas que contar. ok?
un besazo
sib
La de historia(s) que vamos acumulando en el interior, ¿verdad?
Creo que en eso sí que nos parecemos mucho a los árboles... desde siempre he querido y he respetado mucho a esos venerables señores de nuestro planeta.
muchos besos